Por Jorge Escudero
El 13 de marzo de 2013, se inauguró en Chile observatorio astronómico terrestre más grande del mundo. Explora el cielo buscando ondas de radio. Es un conjunto de antenas parabólicas que trabajan en paralelo, ubicadas en una zona desértica, con poca interferencia de contaminación o vapor de agua en la atmósfera.
El Sol emite luz y otras radiaciones que forman parte del espectro electromagnético. La luz es una porción de ese espectro que el ojo humano puede detectar. Pero hay otras radiaciones con diferentes longitudes de onda, que solo se pueden registrar con instrumentos especiales: ultravioleta, infrarrojo, rayos X, ondas de radio.
Las estrellas y otros objetos lejanos del universo, también emiten radiación en todo el espectro electromagnético. Algunos de ellos, que no emiten luz, se hacen visibles si se utilizan los elementos adecuados. Por ejemplo, si apuntamos una antena parabólica al cielo, podemos reconocer ciertas señales. A principios de siglo XX, se pudo comprobar que desde el espacio, los cuerpos celestes nos envían ondas de radio. Lo primero que se detectó fue el centro de la vía láctea.
Para trabajar con radioastronomía es importante tener un buen receptor y cuanto mas grande mejor. Por eso, en Chile se instaló el sistema ALMA (sigla en inglés de Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), un radio telescopio formado por un grupo enorme de antenas parabólicas que trabajan en conjunto. Está ubicado a 5058 metros de altitud en el desierto de Atacama, a 50 kilómetros de San Pedro de Atacama.
“Lo que tiene de especial este lugar es que aquí, arriba de nuestras cabezas, no hay prácticamente vapor de agua. Hay tan poco que la radiación que llega del objeto celeste, de la galaxia o estrella, llega sin problemas”, cuenta el astrónomo de ALMA, Giani Marconi.
El ALMA, descrito como el mayor proyecto astronómico del mundo, es fruto de una asociación internacional entre Europa (a través de la ESO), Norteamérica y Asia del Este, en colaboración con Chile. Está compuesto por un conjunto de 66 radiotelescopios que tienen un diámetro de entre 7 y 12 metros. Están preparados para observar longitudes de onda milimétricas y submilimétricas.
La ESO (European Southern Observatory, en español, Observatorio Europeo Austral) es una organización astronómica europea, que cuenta con el respaldo de quince países. La Sede Central, que incluye el centro científico, técnico y administrativo de la organización, se encuentra en Alemania. La sede en América se ubica en Santiago de Chile.
ESO opera en Chile tres instalaciones de observación únicas en el mundo. En La Silla, posee varios telescopios ópticos de tamaño medio, incluyendo a TRAPPIST, el buscador de exoplanetas de baja masa más eficiente hasta el momento. En el Cerro Paranal, administra el Very Large Telescope (Telescopio Muy Grande, VTL), el telescopio óptico terrestre más avanzado del mundo, que aloja también el Interferómetro VTL y dos telescopios de sondeo, el VST y VISTA. En el Llano de Chajnantor, se encuentra el ALMA, donde además opera el telescopio submilimétrico APEX.
El Dr. José Gallardo, es Investigador y astrónomo del DAS (Departamento de Astronomía) de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, de la Universidad Nacional de Chile. Trabaja en ALMA y participó en una entrevista en Radio Cooperativa de Chile, donde entre otras, cosas habló acerca de sus comienzos en la Física, y las tareas que realiza en la actualidad organizando la información que recibe el sistema de radiotelescopios. Las capacidades de recepción de ALMA han permitido recepcionar datos aún antes de su inauguración oficial. Queremos compartir el video la entrevista con Uds. CLIC AQUI
NUEVO: Video de una conferencia del DR. José Gallardo
Fuentes y notas relacionadas:
Nota del diario La Capital de Chile, el día de la inauguración de ALMA
ALMA descubre una fábrica de cometas en una estrella a 400 años luz
Facebook del Depto de Astronomia de la U. de chile
