El sábado 30 de agosto, volvimos a visitar el Observatorio Astronómico Municipal Ing. Ángel Di Palma, de la ciudad de Mercedes, provincia de Buenos Aires, Argentina. Asistieron también representantes de la Asociación Espacio Profundo.
Fuimos recibidos por el Director del Observatorio, Sr. Miguel De Laurenti. El tiempo nos ayudó ya que al atardecer parecía que estaría muy nublado; más tarde, el zenit se despejó y pudimos hacer observaciones con nuestros telescopios, algunos de los cuales, fueron ensamblados en el taller de la Asociación EnDiAs.
El telescopio del Observatorio estaba en reparaciones: el espejo secundario necesitaba mantenimiento y por unos días estaría fuera de servicio.
La gente fue llegando de a poco, y algunos permanecían un rato para luego retirarse muy satisfechos. Había viento y no todos tenían suficiente abrigo. Pudimos saborear unos ricos sandwiches de miga y una pastafrola muy especial, todo acompañado con mates calentitos.
En el cielo el espectáculo era muy vistoso. Hacia el sur había pocas nubes, y justo al lado de Beta Crux, en la Cruz del Sur, cercana al horizonte, se dejaba ver el Joyero, al cual todos apuntamos nuestros telescopios varias veces con diferentes aumentos, para alegría de nuestros visitantes. En lo más alto del cielo se destacaba la forma blanquecina de la Vía Láctea, con sus incontables cúmulos y nebulosas. Pudimos ver con todo detalle, los cúmulos M6 y M7 en Escorpio. También pudimos observar M8, La Laguna, nebulosa espectacular en la constelación de Sagitario, con su franja oscura y sus estrellas brillantes a un costado.
Otro objeto que recibió nuestra atención fue el planeta Júpiter. Pudimos contemplar sus cuatro lunas más brillantes alineadas, y asombradísimos, vimos como una de ellas se ocultaba tras el planeta ante nuestros ojos. Fabuloso realmente: de un momento a otro, solo vimos tres lunas.
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